domingo, 13 de junio de 2010

Las revistas de mi vida

Post para las féminas básicamente.

¿Qué leían ustedes en la edad de los granos, hormonas revolucionadas y cuando una se sentía súper mayor? Las voy a nombrar cronológicamente, porque todas llevaban un orden, cuando dejabas de comprar una para pasarte a la “superior”, es que ya eras más mujer, ya eras una entendida y te sabía a poco lo que te contaban. Había que ir ampliando horizontes. Así fue mi orden, si alguna lo hizo de algún otro modo, que no dude en comentar. Allá vamos…

1)Super Pop

2)Bravo

3)Nuevo Vale

4)Ragazza

5)Cosmopolitan

Ignoro cómo serán todas estas revistas actualmente (excepto la Cosmopolitan, que si la pillo por ahí le sigo echando un vistazo, pero ya no me la compro), creo que prefiero permanecer en el desconocimiento la verdad. Tampoco es que sea tan mayor, pero me da un poco de asquito/pena lo que viene siendo la nueva generación. No quiero generalizar, que habrá de todo, pero… Ufff. Así que si pasamos el modo de vida de los new teens a las revistas, jodida está la cosa. En cambio, si siguen manteniendo su antiguo formato, pues quitando alguna que otra parida, en general esas revistas estaban bien, o al menos a mí me entretenían.

Mis secciones favoritas eran las historias personales de la gente contando cualquier anécdota de su vida, sufrimientos, cómo conoció a X, etc.

En el terreno sexual, creo recordar que decían las cosas con cabeza, es decir, que siempre te decían que había que protegerse blablabla. Otra cosa eran las tonterías de técnicas de ligue, hechizos para conquistarlo y chorradas varias.

Si había cotilleos no me acuerdo. Sí que te contaban cosas de tus “artistas favoritos”, pero no creo que llegara a la exageración de hoy en día, de contarte hasta con cuántas legañas se despierta uno pegadas a los ojos al despertar.

Siempre te hacían regalitos, en su mayoría eran posters, pero era lo menos que me gustaba, ya que no era de colgarlos en la pared, se quedaban en la revista, los regalaba, o iban a la basura. Que yo recuerde, sólo tres posters estuvieron en mi habitación: uno de Angelina Jolie, por cortesía de un colega que sabía que me gustaba, uno de un dinosaurio (adoro a esos bichos magistrales) y uno de un iceberg, el típico que está en todas partes. Tampoco duraron mucho puestos.

No sé si han salido al mercado nuevas revistas dirigidas a los (pre-)adolescentes, si mejores, si peores… Pero guardo un buen recuerdo de éstas, aunque sigo sin querer comprobar su contenido actual.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este blog no se hace responsable de las opiniones vertidas por sus visitantes. Todo parecido con la realidad es pura coincidencia. Peace.