Creo que este verano me dedicaré a las fiestas de pueblo... Sí, sí... Serán cada año más decadentes (que no hay juventud vamos), pero las costumbres (sanas y cuerdas) siguen ahí año tras año, y yo, ignorándolas por completo. He ido a una donde comí gratis y bien, había gente la justa y si no hubiese sido el tremendo calor que hacía, hubiera sido una tarde muy agradable y diferente. Se acercan otras, en las que hay concursos de postres y todo, ¡cómo faltar! Voto por un verano alternativo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Este blog no se hace responsable de las opiniones vertidas por sus visitantes. Todo parecido con la realidad es pura coincidencia. Peace.