¡¡Diciembre!!

Ou yeah! Mi mes ha llegado. No parece que lo haya hecho por estar donde estoy pero cuando vuelva a casa por navidad como el turrón de seguro lo notaré. Y es que diciembre es mi mes favorito por una serie de razones:

Es invierno, que es mi estación más favorita después del otoño. Pero ojo, el invierno canario, si viviera en otro sitio de seguro no lo sería. Fríííooooo :D

Hay vacaciones largas. La navidad (aunque ocupe enero). Y sí vale, que si consumismo, que si falsedad, blablabla. Todo eso ya sé que está ahí, pero también se puede esquivar. Me gusta mucho porque mola ver la decoración, las luces (muchos se quejan de que si es mucho gasto, que si son bobadas, pero joder, un poquito de espíritu navideño no le hace mal a nadie, a parte, que yo se la dedico a los niños y eso que no me gustan, nosotros adultos a callar). Al que sí que soporto cada vez menos es a Papá Noel, fuera tú.

Es mi cumpleaños. Realmente no me gusta mucho ese día, puedo convertirme en otra persona que prefiere estar sola y no salir de la cama en todo el día antes que celebrarlo de alguna forma. No sé por qué me pasa pero me pasa. Dudo que sea todo porque una se hace mayor, el problema tiene que estar en otra parte. Aún así, me gusta ser una chica-invierno y me mola mi signo zodiacal.

La navidad es la ÚNICA época del año en la que verdaderamente me gusta estar en sitio pequeño de mis orígenes, más concretamente en el sitio en el que vivo. Es cuando único ves ambiente casi todo el día por la calle, da gusto salir y ver que vive gente, que no es un pueblo fantasma como lo es el resto del año. Como son unas fiestas algo obligatorias en el sentido familiar, todo el mundo regresa y da gusto encontrarse con caras conocidas, porque si voy en periodo fuera de vacaciones no conozco a nadie. Me gusta, me gusta salir, me gusta pasear, me gusta ver vida, me gusta sentir el aire más puro y fresco.

No esperes encontrarte chocolate caliente en muchos sitios si no es por estas fechas. J’adore le chocolat.

En mi familia (somos muy poquitas personas) nos solemos regalar más el día 24 que el día de reyes, pero hay un motivo para ello justificado. Y a nadie le amarga un regalo, ¿no? Por supuesto no hay que esperar a esas fechas para regalar, pero bueno, la costumbre está ahí y no me parece un horror. El chollo a mí se me acabó hace años, lo de tener dobles regalos, el cumple y la navidad quedan repartidos.

El año acaba y da comienzo a otro, aunque no me gusta que el tiempo pase muy rápido sí que hay cosas que prefiero dejar atrás, muy lejos.

Y no sé… simplemente me encanta. Además, me gusta el nombre del mes y todo, suena bonito.